La estatal mexicana Pemex aumentará el proceso de crudo en sus seis refinerías domesticas después de recortar recientemente las exportaciones de crudo, en un intento final por reducir la dependencia de las importaciones de combustible en los últimos meses del mandato del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Las exportaciones de crudo de Pemex alcanzaron su mínimo en ocho años en marzo, cayendo en 15pc a 847,000 b/d año tras año, según datos de Kpler.
Además, Pemex canceló algunos envíos de crudo a la costa del Golfo de Estados Unidos en abril, de acuerdo con una fuente, y operadores sugieren que el suministro podría reducirse aún más durante el segundo trimestre.
Pero México no realizará recortes "significativos" en las exportaciones de crudo inmediatamente; en su lugar, el país las reducirá gradualmente a medida que las refinerías domésticas aumenten su capacidad de proceso, dijo López Obrador el 4 de abril durante su conferencia de prensa matutina.
La disminución de las exportaciones de crudo hasta ahora se debió en parte a una menor producción, ya que Pemex, junto con sus socios, produjo 1.55 millones b/d de crudo en los primeros dos meses del año, una disminución de 2pc en comparación con el mismo periodo de 2023, según los datos de la empresa.
Pero la principal razón podría ser que Pemex intente aumentar la producción del sistema nacional de refinación para reducir las importaciones de combustible en línea con la promesa de campaña de López Obrador de hacer a México más independiente en energía.
Esto parece ser "principalmente un movimiento político en lugar de una decisión estratégica, ya que el negocio de refinación sigue provocando pérdidas millonarias para Pemex", dijo a Argus una fuente familiarizada con las operaciones de la empresa.
La división de refinación de Pemex (Pemex TRI) reportó una pérdida de Ps74,000 millones ($4,400 millones) en 2023, una mejora con respecto a una pérdida de Ps187,300 millones el año anterior, según los resultados financieros de la empresa. Pero Pemex TRI ha registrado más de Ps800,000 millones en pérdidas entre 2019 y 2023, como muestran los mismos datos.
Desde que López Obrador tomó la presidencia en diciembre de 2018, el gobierno tiene como objetivo reforzar Pemex y restringir la inversión del sector privado en los mercados mexicanos de energía.
Una de las iniciativas clave desde el inicio de la administración fue lograr la autosuficiencia en la producción de gasolina y diésel, lo que impulsó inversiones de más de $29,000 millones en las capacidades de refinación de Pemex desde 2019.
Mientras México sigue importando aproximadamente dos tercios de su demanda de gasolina y diésel, esto podría cambiar este año después de los mejores dos meses del sistema nacional de refinación en siete años.
Los datos de Pemex muestran que sus seis refinerías nacionales procesaron 934,300 b/d de crudo en febrero, un aumento de 16pc en comparación con el año anterior.
Retos futuros
Pemex podría procesar más de 1 millón b/d de crudo en 2024 por primera vez en nueve años, pero la empresa seguirá enfrentándose a desafíos operativos en sus refinerías.
La refinería de Tula con capacidad de proceso de 315,000 b/d, la segunda más grande de México, se enfrenta al exceso de producción de combustóleo, un producto residual que ocupa un valioso espacio de almacenamiento necesario para productos de mayor valor.
A diferencia de la refinería Salina Cruz de 330,000 b/d, la más grande de México, Tula no tiene acceso directo a un puerto marítimo para los envíos, lo que hace que sea aún más difícil desechar el combustóleo y mantener sus niveles de producción.
En febrero, Tula operó a una capacidad de 79.7pc, la tasa más alta desde mayo de 2016, según los datos de Pemex.
Pero esto se debió a una fuerte disminución de la producción en Salina Cruz, que tuvo uno de sus dos trenes de refinación fuera de servicio durante la mayor parte del mes. Es poco probable que ambas refinerías puedan operar con una capacidad superior a 60pc al mismo tiempo, una fuente familiarizada con las operaciones de Pemex dijo a Argus.
Tula seguirá enfrentándose al problema del exceso de producción de combustóleo hasta, al menos, finales de año, cuando la coquizadora en construcción comenzará operaciones según Pemex.
La empresa también está construyendo una coquizadora en Salina Cruz, pero se espera que opere hasta finales de 2025.
El gran rompecabezas
Las exportaciones mexicanas de crudo podrían seguir disminuyendo en los próximos meses si la refinería Olmeca, que lleva mucho tiempo retrasada, inicia operaciones.
Es poco probable que Olmeca comience operaciones en abril como prometió López Obrador recientemente, ya que la refinería no ha cumplido varios plazos establecidos por Pemex, la Secretaría de Energía y el propio López Obrador, la última de ellas en febrero.
La planta de desulfuración de diésel de Olmeca está lista para comenzar a funcionar, pero la unidad de destilación primaria, que separa el crudo en varios componentes, sigue teniendo problemas, según fuentes del mercado.
Aunque no está claro cuándo comenzará operaciones la refinería, México parece dispuesto a recortar aún más las exportaciones de crudo pesado maya, alterando el flujo de crudo y combustibles entre México y Estados Unidos.
